Todos los pueblos escandinavos, originarios del norte de Europa, vestían de forma muy similar. Los materiales que utilizaban para fabricar la ropa vikinga eran, mayoritariamente, lana (ya sea tejida o prensada en forma de fieltro), cuero y pieles de diferentes animales. En menor medida, también utilizaban la seda y el lino, aunque estos materiales eran mucho más caros y difíciles de conseguir por lo que estaba reservada para los más ricos.